Phyllis Jones compartió su viaje de compromiso inquebrantable y compasión en una emotiva celebración que marcó su vigésimo aniversario con el Programa HEAT. Su reflexión sobre dos décadas de servicio reveló el profundo impacto de su trabajo y el espíritu perseverante que la impulsa.
Jones, quien ha sido una parte vital del Programa HEAT desde sus inicios, se tomó un momento para reconocer la importancia de este hito:
"Veinte años pueden sonar fáciles, pero es una larga historia llena de desafíos y triunfos", dijo. "No pensé que aún estaría aquí después de todo este tiempo, pero le doy gloria a Dios por guiarme."
Su discurso destacó el crecimiento emocional y personal que ha experimentado junto a las comunidades a las que sirve.
"Ver nacer a bebés y a otros dar su último aliento ha sido profundamente conmovedor", reflexionó Jones. "La alegría y las lágrimas me han moldeado, y mi propósito siempre ha sido servir y mostrar amor a quienes lo necesitan."
El trabajo de Jones en el Programa HEAT ha estado marcado por su dedicación a apoyar a personas de diversos orígenes, incluidas aquellas que enfrentan los desafíos del VIH y el SIDA. Su compromiso con ver a los clientes prosperar a pesar de sus dificultades ha sido un pilar en su carrera.
"Lo que realmente me mantiene en marcha es ver a nuestros clientes sobresalir y superar sus obstáculos", explicó. "Se trata de mostrar amor y ser una oyente constante."
Al celebrar este hito, Jones expresa su gratitud por el apoyo que ha recibido de sus colegas y por la oportunidad de hacer una diferencia.
"Estoy agradecida por el aliento de mi equipo y por la oportunidad de tocar vidas", dijo. "La alegría de ver a los clientes tener éxito y crecer es lo que me impulsa cada día."
Los dos decenios de Jones con el Programa HEAT son un testimonio de su dedicación y del impacto positivo que ha tenido en innumerables vidas. Su historia es un recordatorio poderoso del poder transformador de la compasión y el compromiso.
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